Baño de Inmersion.Placer en Casa!

 

Sumidos en la rutina de la gran ciudad, hombres y mujeres olvidan encontrar un espacio propio para el relax y la desconexión con el mundo exterior.

El agua es sanadora, purificadora y, cuando está tibia, afloja nuestras tensiones. Una ducha fuerte sobre los hombre distiende, pero no lo suficiente como para relajar nuestro cuerpo y nuestra mente.

Relax en casa

Un baño de inmersión cada tanto tiene varios beneficios. El principal es que el cuerpo yace en posición horizontal, por lo que evita el peso de toda la masa corporal sobre los pies. El agua caliente y la sensación de liviandad alcanzan para aflojar los músculos y desacelerar el ritmo urbano.

Pero hay mucho más que se puede agregar al ritual del baño de forma sencilla para lograr resultados sorprendentes.

La clave comienza por elegir la música. Como la banda de sonido de nuestras vidas, la música es un pilar fundamental en cada situación. Una determinada melodía es capaz de despertar ciertos sentidos y apaciguar otros. Lo ideal para este ritual son canciones suaves y que adormezcan los tedios cotidianos.

Sales, aceites y jabones líquidos espumantes son otros aliados necesarios para potenciar el evento. El agua comienza a correr y disuelve el producto elegido según el tipo de piel.

Las sales son conocidas por sus múltiples beneficios: suavizan la piel, eliminan las células muertas y ayudan a cicatrizar, entre otras virtudes. Los aceites relajan, suavizan y nutren. La espuma de baño provee una sensación muy agradable al ponerse en contacto con la piel. La espuma burbujea en el cuerpo y provoca una efervescencia placentera.

La luz y los aromas

Todos estos productos vienen en varios aromas a base de distintos ingredientes. Cada composición, ya sea floral, frutal o de otro tipo, tiene un efecto particular sobre nuestros sentidos, y beneficios específicos en nuestra piel. La lavanda, por ejemplo, es muy relajante; la avellana, muy nutritiva para pieles secas.

Para completar el ritual es fundamental bajar la intensidad de las luces y encender algunas velas. La luz tenue afloja la tensión de los ojos, mejora los posibles dolores de cabeza y relaja.

Si el baño está compuesto únicamente por sales, que no suelen estar tan perfumadas, las velas pueden ser aromáticas. También se pueden encender hornos con aceites específicos. Cada esencia en las velas o en los hornos posee un efecto estimulante o relajante, según la elección. Para esta ocasión se aconseja, por ejemplo, el cedro.

La combinación del baño con los perfumes y la música relaja, alivia el estrés y embellece. La mente, mientras tanto, tiende a volar y descubrir en este camino un estado de desprendimiento de lo cotidiano o, sin previo aviso, la solución a un problema pendiente.

Recorda que en Punto Sanitario tenemos los mas variados estilos en hidros y bañeras para que si decides mejorar tu calidad de vida, tengas buenas opciones para elegir!