Graseras Residenciales y su Papel Vital  Descubre cómo las graseras optimizan el flujo de agua, previenen obstrucciones y aseguran la pureza de tus sistemas de tuberías. ¡Mantenimiento eficiente para un hogar sin preocupaciones! Las graseras residenciales se erigen como un componente esencial, operando con astucia para mantener la armonía entre el agua y las grasas. ¿Cómo funciona una Grasera?  El principio detrás de su funcionamiento radica en la ingeniosa diferencia de pesos entre ambos elementos. Cuando el agua fluye desde el desagüe de la pileta hacia la grasera, se detiene y se enfría estratégicamente. Este ingenioso enfriamiento provoca que las grasas hidrofóbicas, más ligeras que el agua, se solidifiquen y asciendan a la superficie del receptáculo. Este proceso facilita la posterior extracción periódica de las grasas, contribuyendo así a un entorno doméstico más saludable.   Estas graseras, disponibles en variadas formas y dimensiones, se adaptan a la cantidad de viviendas y a

¿Qué es una grasera?  Una grasera, también conocida como interceptor de grasa, es un receptáculo insertado en la tubería de desagüe de las piletas de cocina. Este recipiente cuenta con divisiones internas mediante tabiques transversales que obstaculizan el paso de las grasas. El proceso de tratamiento de agua residual inicia cuando el agua alcanza la grasera.  En este punto, se lleva a cabo la separación de las grasas del agua proveniente de las piletas. Posteriormente, el agua continúa su trayectoria hacia la red de saneamiento. La grasa constituye un residuo que el sistema de saneamiento no puede gestionar, por lo tanto, es necesario eliminarla.  Grandes cantidades de aceites o grasas en el agua residual pueden provocar obstrucciones en el sistema de saneamiento, bloqueando las tuberías de desagüe y generando complicaciones en las plantas de tratamiento del agua. Además, este tipo de vertidos puede tener diversas repercusiones ambientales al ser liberados en cuerpos receptores co

  El tratamiento del agua residual comienza cuando el agua llega a la grasera. Aquí se produce la separación de las grasas del agua proveniente de las piletas, para luego, el agua seguir su camino hacia la red de saneamiento.   La grasa es un desecho que el sistema de saneamiento no puede manejar, por ende necesita se removido de este. Grandes cantidades de aceites o grasas en el agua residual pueden ocasionar obstrucciones en el sistema de saneamiento tapando las cañerías de desagüe, problemas en las plantas de tratamiento del agua o tener varias consecuencias ambientales al ser volcadas en los cuerpos receptores (arroyo o río).   ¿Qué es una grasera?  La grasera o interceptor de grasa es un receptáculo intercalado en la tubería de desagüe de las piletas de cocina. Este recipiente en su interior está dividido en cámaras por medio de tabiques transversales que ponen obstáculos al paso de las grasas.  ¿Cómo trabaja?  Su funcionamiento se basa en la diferencia de pesos que existe entre e

Su funcionamiento se basa en la diferencia de pesos que existe entre el agua y las grasas. La teoría es que el agua proveniente del desagüe de la pileta al llegar a la grasera se detenga y enfríe. Al enfriarse, las grasas hidrofóbicas y más ligeras que el agua se solidifican y suben a la superficie de receptáculo, para luego poder ser retiradas de forma periódica. Las hay de diversas formas y tamaños dependiendo de la cantidad de viviendas que la preceda y del uso que se le de, pudiendo ser individuales o colectivas. También tienen que estar acorde a las exigencias de la normativa vigente.  Para una vivienda particular se exige que posean una capacidad mínima de 10 litros por pileta. Deben estar construidas de un material impermeable y resistente a la acción de los residuos con los que entra en contacto. En general son de plástico, Pvc, hierro fundido, hormigón o losa vitrificada. El lugar de instalación debe ser próximo a la pileta, previniendo la obstrucción del caño de desagüe de